Marina tiene una familia estupenda y la define como alegre, ordenada y sensible.

Las tres viven en una casa muy amplia y bonita, pero necesitaban darle una vuelta a la cocina, el salón y el cuarto de estudio de las niñas.

Hicimos una pequeña reforma en la cocina y el estudio, logrando crear espacios más amplios y luminosos. Sin embargo, el salón no necesitó reforma, así que lo que hicimos fue crear un espacio con personalidad escogiendo los muebles adecuados y acentuando algunos objetos que ella ya tenía.

Una parte muy importante de este proyecto fueron los techos y la iluminación, congeniamos a la perfección con Marina porque a ella le encantaron nuestras propuestas y nos dio vía libre para diseñar esta parte del proceso.

El resultado de la casa es maravilloso, los espacios en los que intervenimos son muy especiales, diseñados con cariño y al detalle. Todo el proceso de esta reforma fue estupendo, Marina tiene un gusto exquisito y creemos que tras esta reforma Marina y su familia viven en una casa que refleja su personalidad: alegre, ordenada y sensible.

*Estilismo de Pilar Perea y fotografía de Raúl Celestino.